Modificar el tipo de retención en la nómina de los empleados es una responsabilidad que recae en la empresa, y es esencial realizarla siempre que se produzca algún cambio significativo en los ingresos o en la situación personal del trabajador. Un cálculo incorrecto de la retención puede resultar en problemas fiscales tanto para la empresa como para el empleado, lo que podría llevar a sanciones o ajustes imprevistos en el futuro.

¿Cuándo y por qué se deben modificar las retenciones?

Las empresas deben actualizar el tipo de retención cuando haya cambios significativos en los ingresos o la situación personal de un trabajador, como un aumento de salario, variaciones en la situación familiar (como matrimonio, nacimiento de hijos, etc.) o cambios en otras deducciones fiscales.

Hacienda permite que estas modificaciones se realicen de forma trimestral, es decir, a partir del 1 de abril, 1 de julio y 1 de octubre. Sin embargo, a partir de octubre y hasta finales de año, cualquier ajuste derivado de un cambio en las circunstancias del trabajador deberá realizarse mensualmente, para evitar impactos fiscales imprevistos al final del año.

Novedades: 

Es importante recordar que si el cambio está relacionado con una variación en las circunstancias personales del trabajador (por ejemplo, un cambio de estado civil o el nacimiento de un hijo), la empresa debe hacer la modificación en la siguiente nómina. Además, el trabajador tiene la obligación de informar estos cambios con al menos 5 días de antelación a la fecha de la nómina.

En Afirma Gestión, contamos con un equipo especializado en la gestión fiscal y laboral para asegurarnos de que tu empresa cumpla con todas las normativas vigentes y evitarte cualquier sorpresa en el futuro. Si tienes dudas sobre cómo gestionar las retenciones de tus empleados o cualquier otro aspecto fiscal, no dudes en contactarnos.