Incentivos fiscales para pymes y autónomos: no los dejes pasar en tu próxima declaración
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- Categoría: Fiscal
- Publicado: Viernes, 25 Abril 2025 09:12

A la hora de confeccionar la declaración de impuestos, tanto las pequeñas y medianas empresas como los autónomos pueden beneficiarse de importantes incentivos fiscales. No aprovecharlos puede suponer perder oportunidades de ahorro relevantes.
Empresas de reducida dimensión
Si desarrollas tu actividad a través de una sociedad (SA o SL) cuya facturación no supera los 10 millones de euros, puedes aplicar los incentivos fiscales diseñados para las empresas de reducida dimensión en el Impuesto sobre Sociedades. Entre los más destacados:
- Libertad de amortización: Puedes amortizar libremente las inversiones en activos nuevos si también aumentas tu plantilla. La cuantía amortizable libremente equivale a la que resulte de multiplicar el incremento de la plantilla media de trabajadores multiplicado por 120.000 euros.
- Amortización acelerada: También puedes amortizar activos nuevos al doble del coeficiente máximo de las tablas oficiales. Si los activos se han adquirido mediante leasing, se podrán amortizar por el menor entre el principal del préstamo devuelto y el resultado de multiplicar por tres el coeficiente máximo de amortización.
- Deterioro de clientes deducible: Se puede deducir fiscalmente el 1% del saldo de clientes a 31 de diciembre como deterioro de créditos. Si ya se aplicó esta deducción en 2023, en el IRPF de 2024 se podrá computar el 1% de la variación de ese saldo, que será gasto o ingreso en función de si el saldo ha aumentado o disminuido.
Incentivos también para autónomos
Los empresarios individuales que tributan por el IRPF en estimación directa también pueden beneficiarse de incentivos similares, siempre que su facturación no supere los 10 millones de euros. Sin embargo, existen algunas diferencias respecto a las sociedades:
- Reserva de nivelación: Solo aplicable a las SA y SL de reducida dimensión. Permite reducir la base imponible anticipando posibles pérdidas futuras, pero no está disponible para autónomos.
- Deducción por reinversión de beneficios: Exclusiva para autónomos. Si reinviertes beneficios en activos nuevos afectos a tu actividad, puedes deducirte el 5% del importe reinvertido en tu cuota del IRPF. Este incentivo no es aplicable a sociedades.
Conclusión
Tanto si eres autónomo como si gestionas una sociedad, es importante conocer y aplicar correctamente los incentivos fiscales que pueden ayudarte a reducir tu carga tributaria. La planificación y la información son clave para aprovechar al máximo estos beneficios.
¿Tienes dudas sobre cómo aplicarlos en tu caso? Consulta con nuestros asesores fiscales para asegurar que estás aprovechando todas las oportunidades disponibles.